jueves, 26 de abril de 2012

Lamentable POLITICA SOCIAL

En el día de hoy se ha celebrado en la Plaza de Toros Cubierta, la Comida que la Concejalía de Servicios Sociales organiza anualmente para todas las personas mayores de 65 años, empadronadas en Moralzarzal, y sus cónyuges.



Según los datos estadísticos de nuestro Ayuntamiento en Moralzarzal, dentro del tramo de edad de entre 65 a 85 años, conviven 1.116 personas.
Suponiendo que, solamente un 70 % de las mismas hagan uso de esta oferta nos encontramos con un colectivo de 770 personas asistente a un acto que a tenor del precio de un cubierto tipo para este tipo de actos (pongamos 40 € unidad), totalizan un costo final de más de 30.000 €.
Es francamente vergonzoso que en una situación de crisis como la que actualmente padecemos, con unos presupuestos municipales restrictivos que han realizado recortes en sueldos y ventajas sociales a los empleados municipales, que han eliminado la casi totalidad de subvenciones a los centros escolares, que han incrementado todo tipo de tasas por utilización de servicios sociales, culturales y deportivos, se siga despilfarrando y malgastando el dinero público de forma tan aberrante.
Y por supuesto no vale como justificación “el homenaje a nuestros mayores”; en la época actual, afortunadamente, ninguno de los mayores asistentes a este acto necesita de “comedores sociales” que le llenen el buche. Una simple ojeada al colectivo nos ratifica en esta afirmación.
Esto es “puro populismo”, asalto indiscriminado a las arcas públicas, utilización indebida de fondos municipales, y culto a la personalidad del Alcalde y sus adláteres, bien en agradecimiento a sus votos, bien en un acto más de intento de compra de voluntades, que es el camino que el Gobierno municipal viene utilizando desde hace años.
Si quieren hacer POLITICA SOCIAL (en mayúsculas) para nuestros mayores, tienen multitud de nichos en los que aplicar con un criterio más racional y justo estos 30.000 €, y si no saben hacerlo …. pues ya saben: “a aprender a Salamanca” y dejen libres los sillones.

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